viernes, 31 de mayo de 2013

Capitulo 10

Nos encontramos en el centro con Alice y Danna.  Amy, no me dio tiempo a presentarla, nada más llegar, se acercó a ellas con una enorme sonrisa. 
-Yo soy Alice y ella es Danna- dijo dándole dos besos y señalando a Danna, que esta se acercó a Amy con timidez.  Tras la presentación de Amy.  Alice se dirigió a mí con una enorme sonrisa y un pequeño regalo entre sus manos. 
-Toma, es de parte de Danna y mío- me dio el regalo con una sonrisa y haciéndole un gesto a Danna para que se acercase- ¡Felicidades!
-Muchas gracias, pero no hacía falta que me compraseis nada- dije con una enorme sonrisa mientras abría el regalo. Era un colgante de amistad, ella ya lo tenían puesto.  Ya tenía dos colgantes, el que me regalara Amy antes de irse y el que me habían dado ahora.
- Solo es un detalle. No nos gusta dejar a la gente sin regalo el día de su cumpleaños- Danna se acercó, y nos dimos un abrazo en grupo.  Amy estaba un poco marginada, pero pronto entendió mi gesto para que se uniera al abrazo.
- ¡Esta noche toca fiesta!- dijo Alice alzando las manos y haciendo un pases de baile un poco raro.
-¿Fiesta? ¿Dónde?-dije extrañada.  No tenía pensado organizar una fiesta por mi cumpleaños. Si, ya era mayor de edad, pero prefería quedarme en casa con Amy viendo una película.
-¿No pensarás quedarte en casa?- se acercó a mí y puso su brazo por encima de mis hombros.
-Pues…yo…
-Que sosa eres- dijo entre risas- Te prohíbo quedarte en casa el día de tu cumpleaños.- miré a Amy, parecía muy entusiasmada con la fiesta. Así que accedí.
-Está bien- cuando dije eso, Alice, inmediatamente me dio un achuchón en el que quedé sin respiración- Pero…¿Dónde la celebraremos?
-Por eso no te preocupes. Danna y yo nos encargamos de eso- dijo dirigiéndose a Danna y dedicándole una sonrisa.
-Si, Alice tiene razón. Nosotras nos encargamos de ello- dijo Danna al fin con una sonrisa tímida.  Cuando salió el tema de la fiesta, se le cambió la cara automáticamente.  Tenía un gran complejo con su cuerpo.  Y sabía que eso era un gran problema al salir de fiesta. Todos la mirarían con cara de asco.  Pero Alice, Amy y yo estábamos dispuestas a cambiar eso.
-Danna, ¿que te pasa?- dije acercándome a ella y dándole un abrazo.
-No es nada, simplemente no me apetece salir de fiesta- dijo bajando la mirada- Mi cuerpo y yo, no encajamos en eso.
- ¡Tonterías!- dijo Alice rápidamente-  Eres guapísima, solo que vivimos en una sociedad que da asco y no saben apreciar la belleza interior.
- Alice, no hace falta que mientas para hacerme sentir mejor.
-Nadie está mintiendo. Hazle caso, eres guapísima- dijo Amy acercándose a nosotras.
- Nosotras te ayudaremos- dije con una enorme sonrisa y mirando a Alice y Amy.

Danna, ya estaba un poco convencida.  Esa noche saldría de fiesta con nosotras y se lo pasaría en grande.  Con el calor que hacía decidimos ir a tomarnos unos helados.  Alice, en su cabeza ya estaba imaginando la noche perfecta y nos comentaba todos los detalles.  Yo, cada vez, tenía más ganas de que llegara la noche, al igual que Amy, que esta no se separaba de su cámara y en cuestión de segundos empezaron a aparecer flashes por todos los lados.  Alice, Danna y Amy, congeniaron perfectamente, parecían amigas desde hacía mucho tiempo.
-Alice, ¿a quién vas a invitar a la fiesta?- pregunté con emoción. Solo quería obtener un nombre. El de Damian.
-¡Ah! Es una sorpresa. Solo te mandaré un sms con el nombre del lugar y la hora.
- ¿Me vas a dejar con tanta intriga?
-Pues sí. Y hablando de la fiesta, me voy a casa con Danna a  planearlo todo- cogió sus cosas, le hizo un gesto a Danna para que también lo hiciera y las dos salieron por la puerta.
-¡Hasta Luego!- gritó Amy, pero ya era demasiado tarde. Ya se habían ido- Bueno, iremos a casa a arreglarnos, ¿no?
- Sí, claro, vamos- pagué el helado y nos fuimos. En la fiesta, quería encontrarme con Damian y estar toda la noche con él.
Cuando llegamos a casa Amy puso a cargar la cámara y yo miré el móvil. Tenía un mensaje de Alice:
“¡Ey, cumpleañera! La fiesta es en el Pub Tentación, a las 22.00h. No lleguéis  muy tarde y poneros guapísimas. X0X0


Faltaba 2 horas para las diez. Teníamos el tiempo suficiente para arreglarnos y llegar a nuestro destino. Aprovecharía la ocasión para ponerme el vestido que me había regalado mi madre esa mañana. Amy, a pesar de no saber nada de la fiesta, trajo un vestido precioso. Bajé a la cocina a comunicarle a mi madre lo de la fiesta. Le había parecido una buena idea para celebrar mi décimo octavo cumpleaños. Quedaban unos 5 min para irnos, y aproveché para mirar el Tuenti. Tenía más de 80 felicitaciones en mi tablón. Era algo estresante tener que responder a todos ellos, pero me hacía mucha ilusión. Estábamos dispuestas a abrir la puerta, cuando…